Feminismo ¿Para qué?

Me doy cuenta al nombrar la palabra Feminista como chirría en la otra persona, incluso he tenido la oportunidad de escuchar que supone de mi quien está en frente:  Machona, Lesbiana, Superior al hombre,  Pelo en pecho,  Loca… Y muchas otras etiquetas que no me cabrían en este post.

Qué bien lo ha hecho el patriarcado, el movimiento social más importante de la historia pretenden hacerlo añicos una y otra vez sin dar tregua.

Y digo importante porque gracias a este movimiento las mujeres hoy podemos votar, tenemos derecho a intervenir en el ámbito público, a denunciar la violencia privada,  ley del divorcio, se ha logrado el reconocimiento mundial de nuestros derechos políticos, civiles y sociales, así como nuestros derechos sexuales y reproductivos, algo que en estos momentos están intentando cambiar. 

También gracias al Feminismo los hombres tienen derecho al permiso de paternidad,  han dejado de ser proveedores exclusivos de la familia, pueden expresar sus emociones o incluso pueden dejar de ser superhéroes, siempre y cuando ellos lo decidan. 

Estos logros se han conseguido gracias a que mujeres y hombres feministas durante muchos años han luchado y alzado la voz deseando alcanzar igualdad de oportunidades y resultados.

El machismo, que no es lo contrario que el feminismo, aprovecho para aclarar que lo contrario sería el hembrismo, ha trabajado duro para generar una brecha muy profunda entre hombres y mujeres. Por ello es necesario seguir avanzando, sensibilizando y posicionándonos para eliminar esa brecha, pues todavía quedan objetivos por alcanzar como la igualdad en los salarios o la desaparición de la violencia de género.

Me dices que el Feminismo hoy no sirve de nada, sin embargo, echando un vistazo  a mi alrededor, leyendo y escuchando los medios de comunicación, o simplemente observando personas de mi entorno, dentro de mi surge una voz guerrera que aúlla: “Cuanto queda por hacer!!”

Seguiremos Tejiendo Redes, de eso no cabe duda…